Los discursos parlamentarios de Práxedes Mateo-Sagasta

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Legislatura: 1861-1862 (Cortes de 1858 a 1863)
Sesión: 28 de enero de 1862
Cámara: Congreso de los Diputados
Discurso / Réplica: Discurso
Número y páginas del Diario de Sesiones: n.º 47, 799
Tema: Exposición de comerciantes e industriales de Badajoz y Cáceres sobre reforma de papel sellado. Presupuestos de la Presidencia del Consejo de Ministros, capítulo 3º: Estadística

El Sr. SAGASTA: Dice el Sr. Núñez Arenas que no he atacado el dictamen de la comisión. Yo ataco la autorización de la junta en general; no quiero que se destruya todo lo que hay de estadística: si quitásemos esa partida, quedaríamos sin esa dependencia. Lo que yo deploro es que tenga ciertos vicios con los cuales es imposible que dé resultado alguno. Hoy el Gobierno no estará disgustado de mí me he limitado a darle consejos, y en mí esto es poco común, y le he tratado hasta con cariño, aunque no me tenga a mí mucho el Sr. Presidente del Consejo. Otra vez le trataré de otra manera.

Dice S.S. que no ha encontrado excesiva la partida. Yo tampoco he entrado en este detalle: si lo hubiera hecho, hubiese dicho que no comprendía hubiese un centro directivo con 21 oficiales y 6 escribientes. ¿Se concibe esto sin una desorganización absoluta? Yo no lo comprendo, a no ser que los oficiales sean escribientes, en cuyo caso son unos escribientes may caros. Si fuera lo contrario, lo comprendo; pero eso no lo comprendo.

Se dice que las direcciones de esa dependencia no tienen la importancia que las demás direcciones. Pues entonces, ¿por qué llamarlas así? Si no son más que negociados, llámense como deben llamarse, negociados, y no direcciones.

No he entrado yo en la competencia de las personas que figuran en esta junta; al contrario, la he reconocido; pero he dicho que podían ser muy competentes y no servir para el caso por estar ocupadas en otras cosas. ¿Creen los Sres. Diputados que hay persona alguna que pueda desempeñar bien tres destinos a la vez, todos de grandísima importancia? Sabrán mucho, serán muy competentes; pero sino tienen tiempo ni medios, ¿cómo pueden hacer las cosas? Después parece hasta cierto punto que el Sr. Núñez Arenas me hacía un cargo de que yo hubiera dicho que la comisión podía tratar o examinar la organización de la junta de estadística.

Yo he dicho que la comisión podía hacer eso, porque aun cuando la organización de una dependencia no se viene a discutir aquí, las Cortes pueden variar esa organización negando la partida, porque si corresponde a una organización viciosa, el medio de hacerla desparecer es discutir las partidas y negarlas o concederlas. En todos los ramos de la administración pública sucede lo mismo. La organización de los ministerios no se discute tampoco, pero se discuten las partidas, y entonces se está en el caso de considerar si la organización es o no viciosa y si cuesta mucho o poco. Esto creo que puede hacerlo muy bien la comisión de Presupuestos, y sobre todo lo puede hacer el Congreso.



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